Nombre | Daarmina |
Elementos | Orden, ejércitos |
Número sagrado | 8 |
Zona de adoración | Eridie |
Símbolo | |
Se trata de una diosa cuya dedicación ha evolucionado en los últimos siglos. Aunque antiguamente era patrona de los soldados y de los ejércitos, actualmente su foco parece haber mutado más hacia "cualquier cosa que requiera concentración".
Mantiene relaciones positivas con Airi y Armeniam, con los que forma la "Alianza del Orden". Ha tenido malas relaciones tradicionales con Thargron y todos sus aliados.
La zona de adoración de Daarmina se restringe a Eridie, donde es deificada como diosa patrona. Particularmente los militares eridios tienen una mayor afiliación.
La corrección no tiene noticias de ningún culto menor a Daarmina en territorio de Dormenia.
No existe un libro reconocido como principio fundamental de la religión de Daarmina, pero se considera que el "Libro de la fundadora", obra magna de Eridie, resume suficientemente bien los principios de Daarmina como para servir como tal.
Sí son mucho más evidentes los templos eridios. El más grande de ellos, la cima de la fundadura, es una construcción a cielo abierto situada en la colina más alta de Paenia. En ella se mantiene una llama encendida desde la fundación.
Cada asentamiento eridio tiene su propio templo menor, normalmente de marmol o granito, con una estatua, o al menos un símbolo.
Ritos
Tres ritos mayores se celebran en Eridie en relación con la diosa. El último día del quinto mes, cada cuatro años, es la festividad mayor. En ella se realizan torneos y es festivo nacional.
Los restantes tres años se celebra una festividad menor de graduación el último día del cuarto mes.
Finalmente, el vigésimo día del tercer mes se celebra la fundación de Eridie.
Existen una multitud de ritos menores practicados principalmente por los soldados eridios. El más usual de ellos es el saludo, que se realiza presentando el arma principal, ofreciéndola de ser de más bajo rango, o cogiéndola por el mango en caso contrario.
Otros ritos menores son los siguientes:
Presentar el arma ante el estandarte al visualizar al enemigo.
Poner copa de agua debajo del estandarte.
Dar tres golpes leves del arma contra la hombrera derecha antes de utilizarla, particularmente en el caso de jabalinas y flechas.
Rezar ante el estandarte.