Llega un momento en el que hay que saber cómo acabar las cosas. En la situación actual he seguido la dinámica que ya transmití hace unos pocos días al dejar la administración de Ocin, y anuncio ahora mi intención de abandonar también mi actividad como difusor del juego de rol y de mesa de Espada Negra para sumirme del todo en ocupaciones creativas.
Como ya mencioné a todos los hermanos, hay dos motivos principales que me hacen tomar esta decisión. Voy a intentar manifestarlos en este último artículo.
El primero es simplemente que las redes sociales me llevan demasiado tiempo, y esto afecta a la cantidad de material creativo en el que puedo implicarme, lo que creo que a medio plazo es peor para todos los que disfrutamos de Espada Negra.
El segundo motivo es que las situaciones que se provocan me llevan a un estado de malestar bastante desagradable. La situación ha llegado a un momento en el que no puedo hacer una crítica sobre algo sin que se señale lo malo que es Espada Negra o lo miserable que soy. Aunque esto debería resbalarme, por algún motivo ha terminado por agobiarme mucho, y para estar en una comunidad auto censurándome prefiero no estar.
Quiero señalar que hay mucha hipocresía en todo esto. He visto a personas decir cosas en privado y las contrarias en público, y personas reconocer que atacan a Espada Negra por pura pose para distraer la atención de otros proyectos. Unas actitudes miserables desde mi punto de vista.
No me arrepiento de haber luchado contra todo tipo de matones a lo largo de estos años. Algunos nos atacaron a nosotros, y otros no. Los combatí a todos con todo lo que tenía, y creo que en parte gracias a mi aportación se consiguió algunos avances o dar voz a colectivos que permanecían callados. Pero en cualquier caso yo no soy más que nadie, todo el mundo podrá defenderse por su cuenta.
Quizá algunas personas afines a mi mentalidad piensen que soy algo extremo y quieran convencerme de que no obre de la forma que voy a detallar a continuación. Esto es una decisión meditada y firme respaldada también por actos pasados: hace un par de meses que decidí escribir muchos menos artículos, sin más resultado que frustrarme a mí mismo por la limitación y seguir participando lo mismo en las redes sociales. Las medias tintas no van conmigo. Si me quedo acabaré compartiendo treinta artículos al mes y seguiré denunciando todo lo que me parece injusto una y otra vez, con mayor desgaste para mí.
Mi decisión se manifestará de las siguientes formas:
- No publicaré más artículos públicos sobre juegos de rol, de mesa o moral en mi blog de Espada Negra ni otros lugares. Quizá envíe algo de características neutras a ocin de vez en cuando, pero desde luego no a corto plazo.
- No atenderé más a las redes sociales. No las cerraré porque mi cuenta es un recurso valioso para los hermanos, pero sus nombres quedarán permanentemente cambiados a uno neutro y pasarán a estar gestionadas por otro miembro del equipo.
- No iré a más jornadas con el propósito de difundir el juego de rol o de mesa de Espada Negra, más allá de aquellas con las que haya una clara relación de amistad establecida en el pasado o tengan este tipo de actitud tan infrecuente.
No abandono para nada ninguno de los proyectos de Espada Negra, y de hecho estaré más entregado a ellos de lo que lo he estado en muchos años. Me comprometo a realizar mucho más material que espero que la hermandad ponga a disposición de todos. Seguiré poniendo metas en “Juégame” y celebrando partidas públicas y privadas.
Creo que retomaré mi costumbre de escribir muchos artículos, pues es algo que me apasiona y tengo un poco abandonado, pero los publicaré en cerrado, en el foro privado de la hermandad de Espada Negra. Seguramente también pase a escribir de otros aspectos creativos en los que estoy implicado, y a lo mejor esos sí que me decido a publicarlos en abierto, aunque sin duda tengo que meditar sobre el asunto.
Creo que el nombre que voy a poner a mi cuenta de “Google Plus” va a ser “Hermano olvidado”. Tengo la esperanza de que dentro de uno o dos años la leve memoria de internet elimine mi nombre y me elimine a mí, y que sean otros hermanos las caras visibles de un gran proyecto que siga proveyendo de todo tipo de material útil. Pues en este momento como en cualquier otro, lo importante es que se juegue. Y eso
está ocurriendo de forma documentada.
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