Uno de los capítulos que en mi experiencia más llaman la atención del
juego de rol de Espada Negra es el de los seguidores, que refleja una forma de pensar que si bien ya existía en otros juegos anteriores, no es universal de los juegos de rol en general. Nosotros no pretendimos plantear una revolución ni nada así, creo que sí que dimos un pequeño paso en una dirección que no está del todo explorada.
Para aquel lector que no sepa de lo que hablo, el juego pretende reproducir un concepto de árbol de personajes en el que el jugador no solo maneja solamente un personaje, sino una unión de varios que, bien unidos bajo la estructura formal de una organización, o simplemente mediante los objetivos, principios o intereses comunes, coopera de forma continuada.
Obrar de esta forma dota de cierto cuerpo lógico a las campañas, pero incluso yendo más lejos, aporta recursos útiles a los jugadores que se traducen en metajuego. Por ejemplo, podrán jugar otras campañas con estos seguidores y que sigan aportando fuerza a su causa, prestar estos personajes a jugadores ocasionales, o incluso llegar a convertirlos en personajes principales si el suyo tiene que tomarse un descanso o incluso fallece.
Esto nos parece tan importante que intentamos inculcar a los creadores de contenido a establecer las condiciones en las que los personajes de sus partidas se puedan convertir en seguidores de los personajes de los jugadores. Nosotros desde luego hacemos un esfuerzo consciente para que así sea.
De hecho tenemos una herramienta que
permite generar personajes al azar, y aquí viene la motivación del artículo, porque ayer me fue planteada una cuestión: ¿por qué aparecen los personajes con un punto de experiencia en habilidades de esferas?
La mecánica de uso de seguidores es muy divertida y está llena de ventajas para los jugadores que eligen explorar esta faceta social de sus personajes, pero establece algunas limitaciones para que no se de una situación en la que un jugador complemente de forma absoluta todas las necesidades y no necesite a otros jugadores.
Como ya mencioné mucho tiempo atrás, “
La expecialización excesiva aumenta la debilidad”. Es decir, que en el juego de Espada Negra no suele ser conveniente especializarse demasiado porque el personaje puede verse en una situación que no puede solventar. Sin embargo sobre especializar a unos seguidores sin apenas identidad personal (casi incluso sin nombre) sería demasiado tentador. Un jugador que hiciera esto pronto tendría un grupo en sí mismo con muy poca identidad.
Para remediar esto sugerimos mecánicas que en este momento están muy probadas. Por ejemplo nosotros ahora usamos la siguiente regla: un jugador no puede usar los seguidores de su personaje de manera explícita (esto es con la ficha al completo mientras maneja al personaje principal) hasta haber jugado cinco partidas con esa ficha, sin que participe su personaje principal. Mediante esto se consigue que desarrolle su identidad, pero también que modere la especialización excesiva.
Y si bien este asunto de las habilidades puede ser problemático, mucho más lo es el de la elección de las esferas sobrenaturales. De nuevo para el que no lo sepa, los personajes van a tener entre cero y cinco esferas (depende de un atributo) a elegir entre veintiseis. Aquí hay un doble problema: por una parte hay esferas que son muy adecuadas para personajes de soporte, y por otro también existe cierta disipación de identidad.
Voy a poner un ejemplo del primer problema. Algunas esferas como “amor”, “calma” o “todo” son muy poderosas, pero rara vez implican una ventaja para el personaje, sino que permiten crearla sobre otros. El significado mismo de la palabra “sacrificio” queda en entredicho si el personaje tiene la capacidad de decidir incluirlo en un personaje que no es el suyo, y aún así obtener la ventaja asociada.
Este ya fue un motivo suficiente para que incluyéramos en estos personajes aleatorios ya indicadas las esferas a las que pueda acceder. De hecho, estos personajes tienden a “elegir” las esferas más adecuadas para su supervivencia, que son las más prácticas como “oscuridad”, “lucha” o “protección”.
En nuestras pruebas con este sistema de seguidores hemos encontrado que es muy interesante dar uso al generador aleatorio y a los personajes presentes en aventuras. De esta forma los jugadores pueden acceder a las múltiples ventajas de utilizar seguidores, pero no tienen elección directa sobre las capacidades de estos. Este principio obviamente no se limita a los poderes, sino que también se aplica, por ejemplo, a los atributos de los personajes.
A fin de cuentas no podemos elegir las cualidades de nuestros asociados, ¿no?
Retomando el hilo principal, también existe un problema de identidad. En el mundo de Espada Negra los poderes sobrenaturales son muy incomprendidos y ciertamente infrecuentes. Si uno sufre una grave herida permanente, sin duda querrá encontrar a un acólito con la esfera “vida” que pueda regenerarla, mientras que si se ve tocado por la mancha de Taharda, tendrá mucho interés en conocer a un personaje con la esfera “pureza”.
La gracia de todo esto es que un personaje puede realizar una búsqueda significativa para encontrarse con personajes que tengan estas cualidades, y ser un acicate para crear tramas y situaciones excepcionales para la campaña. En mi experiencia esto puede llevar por tres caminos.
El primero es que el personaje busque a un personaje no jugador que cuente con una de estas esferas, pero esto implica un esfuerzo y un intercambio personal y religioso que va a enriquecer la campaña, y que va a dar muchas alas al creador de la campaña.
La segunda opción es que el jugador convenza a otro jugador de que se haga un personaje con la esfera necesaria. Si bien esto puede ser un poco malintencionado, también puede ser divertido si se hace bien, y que de lugar a un gancho para el personaje que lo meta con mucha fuerza en la campaña.
La tercera opción es que el jugador se haga un seguidor y le ponga la esfera deseada. Esta opción no tiene las ventajas anteriores, y cierra un montón de posibilidades tramales otorgando al personaje un poder absoluto.
Supongo que por el momento esto es todo. En verdad luego cada cual jugará como quiera, pero desde luego en esta casa hacemos todo lo posible por facilitar recursos que fomenten la mayor de las inmersiones.
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