BILIOSO

Se trata de un tipo de muerto viviente. Es bastante raro y muy distintivo. Sus atributos incluyen el desplazamiento a cuatro patas y la deformación de la cabeza, convertida casi únicamente en un orificio por el que vomita ácido.

Cualidades físicas

Los biliosos pierden la capacidad motriz así como los sentidos y la piel de la misma forma que los aullantes. No obstante cobran capacidades ácidos en similitud a los muertos blancos. Estos no sufren reventones de las bolsas grasas, sino que se muestran capaces de escupirlas a distancias sorprendentes.

El rostro de un bilioso queda rápidamente deformado por la presencia del ácido. No se trata solamente de que pierdan los ojos y las orejas de forma normal, sino que además el ácido destruye sus labios y dientes y salpica su cara, confiriéndole un aspecto deforme y poco humano.

Conducta

Los biliosos son en general seres bastante poco peligrosos, debido a su falta de vista. Muy rara vez tienen percepción de lo que les rodea, y de hecho si no es alimentado, suele morir a los pocos días. No obstante, si se da el caso de que son controlados por algún tipo de poder sobrenatural, la capacidad de escupir el ácido se vuelve un peligro muy a tener en cuenta.

Grados y proceso

No se tiene conocimiento del proceso de creación de un bilioso.

Combate

Como se ha citado, los biliosos no suelen ser peligrosos en solitario o incluso en manada. Si es una idea sensata eliminarlos aproximándose desde su espalda, en previsión de que pueda percibir de alguna forma el ataque y responder.

No hay que subestimar su efecto en grupo con muertos vivientes con sentidos, no obstante. En estas circunstancias el bilioso puede intuir la posición de los vivos y proyectar su ácido. Este tiene cierta presión y puede alcanzar incluso los veinte pasos.

Los biliosos tardan en segregar este fluido, no obstante, por lo que es buena idea (aunque exige sangre fría) acabar antes que ellos. Por fortuna un bilioso no esquiva los golpes, por lo que una buena hacha o incluso una gran maza son elecciones apropiadas. Se desrecomienda, no obstante, la decapitación, que puede llegar a concluir con la salida del líquido ácido.

Creación

En la actualidad se desconoce el proceso de creación de estas abberraciones.

Invasiones históricas.

No existen fuentes confirmadas. La corrección otorga credibilidad, no obstante, a la historia de un posible ataque en torno al año 439 en la provincia de Medea. La descripción encaja enormemente con lo que posteriormente se ha podido saber de esta criatura.

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