Hermanos Juramentados de la Espada Negra
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Supeditación moral
29-8-2013 13:46
Por Verion
Llevo unos días sin escribir nada sobre el juego de rol de Espada Negra. Siendo uno de nuestros escritos más trabajados no es justo que sea así, y hoy traigo otro artículo sobre una desventaja muy interesante que puede configurar interesantes personajes. Se trata de, "Supeditación moral".
El personaje reconoce a otro personaje como superior, y escucha su criterio más que el suyo propio, bien por cariño, respeto o cualquier otra posibilidad. Si ignora el designio de ese personaje, no recibe motivación durante esa partida.
Es adecuado interpretar esta supeditación. Es muy posible que el personaje tenga mucho carácter con todo el mundo, pero luego sea sumiso y débil con el personaje al que reconoce como superior. Mostrarse inseguro y vulnerable ante él puede suponer una buena interpretación, pero también existen muchas otras posibilidades en función a las diferentes opciones de esta desventaja.
Esta desventaja tiene muchas partes que analizar dando lugar a combinaciones muy variables. Por ejemplo está esa primera sección que indica que escucha el criterio de la persona en cuestión por cualquier posibilidad. Dadas ciertas condiciones incluso puede ser un imperativo social que el personaje no puede incumplir. Amor, respeto, chantaje, contrato, deuda, interés... ¡qué se yo!
La cadena que sujeta al personaje es que no debe ignorar los designios de esa persona a la que "obedece". La penalización, perder toda la motivación (experiencia) de una jornada es muy dura, pero aún así no es tan grave como la de otras desventajas.
Finalmente aparece alguna sugerencia de interpretación, si bien esta es un tanto sutil y está enfocada a algunas posibilidades de las muchas que ofrece la desventaja. El resto de posibilidades crean otras relaciones interpretativas muy a tener en cuenta.
Dentro del marco del sistema, un jugador que implique a su personaje mediante una desventaja como esta tiene derecho a elegir una ventaja. En este caso no creo que haya una predilección narrativa hacia algunas en concreto por encima de otras, pero como siempre hacer una elección contextual ayuda a definir el personaje, o a la inversa, que las mecánicas del juego respondan de forma sólida a su personalidad.
Por ejemplo, podríamos elegir la ventaja "profesional" si el personaje con el que se tiene la supeditación ha insistido mucho a nuestro personaje para que tome una vida dedicada a la mejora de una profesión en concreto, alentándolo y dándole fuerzas cuando le faltaban. O quizá castigándolo y empujándolo cuando no las tenía.
Una de las cuestiones que más me gustan en el sistema de ventajas y desventajas es que pueden vincularse a otros personajes, siempre que el "Creador" lo permita. En este caso puede ser una ventaja muy interesante si no tenemos pensada una gran personalidad para la partida en turno, y queremos tomar una actitud más pasiva que otros jugadores. Buscar en este caso a algún personaje que haya elegido la ventaja "motivado" podría ser la mejor elección, pues nos garantiza que su interés va a ser fuerte.
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Esta desventaja tiene muchas partes que analizar dando lugar a combinaciones muy variables. Por ejemplo está esa primera sección que indica que escucha el criterio de la persona en cuestión por cualquier posibilidad. Dadas ciertas condiciones incluso puede ser un imperativo social que el personaje no puede incumplir. Amor, respeto, chantaje, contrato, deuda, interés... ¡qué se yo!
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Dentro del marco del sistema, un jugador que implique a su personaje mediante una desventaja como esta tiene derecho a elegir una ventaja. En este caso no creo que haya una predilección narrativa hacia algunas en concreto por encima de otras, pero como siempre hacer una elección contextual ayuda a definir el personaje, o a la inversa, que las mecánicas del juego respondan de forma sólida a su personalidad.
Por ejemplo, podríamos elegir la ventaja "profesional" si el personaje con el que se tiene la supeditación ha insistido mucho a nuestro personaje para que tome una vida dedicada a la mejora de una profesión en concreto, alentándolo y dándole fuerzas cuando le faltaban. O quizá castigándolo y empujándolo cuando no las tenía.
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