Hermanos Juramentados de la Espada Negra
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Un teléfono "más justo"
13-7-2013 14:23
Por Verion
Una de las cosas que me señalan en ocasiones es que en este espacio me dedico a hablar exclusivamente de Espada Negra, y que puedo resultar un pesado. Me señalan que hable de otras cosas de vez en cuando, sobre todo de otros juegos de rol. Bien, hoy voy a romper la tónica totalmente y voy a hablar de un proyecto que llamó mi atención hace unos meses.
Supongo que muchas personas estarán conmigo en que el mundo actual está lleno de contradicciones incómodas cuyo origen está en una estructuración social muy desequilibrada. Este asunto que traigo hoy es una de muchas, pero es una de la que tengo cierto dominio porque tengo algunos conocimientos tecnológicos.
En occidente casi todo el mundo tiene móvil. Es más, en occidente casi todo el mundo cambia de móvil cada no-demasiado-tiempo, y aún es más que más, muchísimas personas tienen un "smartphone". En cierta forma es normal, se trata de una herramienta muy versátil que nos permite acceder a grandes contenidos, y el coste no es muy elevado.
Ahí reside quizá la mayor causa de contradicción, y es que generalmente los ciudadanos de occidente tendemos a medir casi exclusivamente en función al coste económico, porque a fin de cuentas es el que nos lleva un esfuerzo. Pero en general las cosas tienen otros costes, como sea el coste ecológico y el coste moral. Son cosas que quizá parezcan un poco lejanas, pero que en mi opinión conviene tener en cuenta. En este caso centraré mi atención en tres aspectos.
El primero es que todos los dispositivos portátiles que utilizamos hoy en día necesitan tantalio, un elemento químico bastante raro. Los humanos lo conseguimos del coltán, un compuesto del que se estima que el 80% mundial está en el Congo (República Democrática del Congo), un lugar del mundo especialmente conflictivo por variados motivos históricos, uno de los cuales es... bueno, que tiene el 80% del coltán mundial. Esto es muy importante porque notables sectores de poder mundial con grandes intereses han alimentado los conflictos bélicos en la zona, y bueno, las condiciones de trabajo no son muy buenas. Trabajo infantil, horarios impensables en el mundo "civilizado", y ese tipo de cosas que no nos gustaría que nos ocurriera a nosotros. La palabra "esclavo" no está descompensada en este caso. Esta gente querría estar como están los trabajadores chinos de las plantas de montaje, lo que va a ser el siguiente punto.
El segundo punto a tener en consideración es que los móviles se fabrican en china y otros paises asiáticos donde el precio de la mano de obra especializada, y las condiciones que se les puede imponer son impensables para otros lugares del mundo. Insisto que en este caso la cuestión de las condiciones es importante, pues no solo se trata de fabricar los teléfonos a un coste aceptable, sino hacerlo también a una velocidad suficiente para que nadie se quede sin su aparato predilecto.
La tercera cuestión que me parece señalable es la que se refiere a la gestión de los recursos, y si bien la cantidad de residuos que un móvil supone es relativamente baja en comparación con otros utensilios o embalajes, hay ciertas cuestiones por las que conviene reciclar los móviles. El primer son los componentes contaminantes (que los tiene), y el segundo el citado tantalio, que se puede reutilizar. En este sentido es particularmente vergonzosa la existencia de vertederos en la india.
Existen otros muchos factores a tener en cuenta, y yo mismo conozco algunos, pero este es un artículo corto, y ya hay bastantes pocas personas que hayan llegado hasta aquí, por lo que iré yendo más al grano. Hace un tiempo vi un proyecto que llamó mi atención. Se trata de "fairfphone", el teléfono "justo", o yo diría "levemente más justo". Centraré en las cualidades que me parecen señalables en este proyecto. Citaré que se ha financiado de una forma un poco "crowfunding", aunque sin la intervención de una empresa ajena, sino desde su propia página, prevendiendo los dispositivos. Y avanzando las conclusiones, diré que es un proyecto que es más una declaración de intenciones que una justicia real.
La primera gran cualidad es que afirman que solo consiguen el coltán de zonas del congo que no están en procesos bélicos abiertos. En este sentido se puede consultar una buena cantidad de documentación y vídeos. Y bueno, esto es un tímido avance, porque por mucho que sean las zonas no militarizadas... no creo que esas minas sean un lugar en el que los trabajadores tengan seguridad social.
El segundo aspecto que es interesante es que están preocupados por las condiciones de los trabajadores implicados en la fabricación del teléfono, especialmente los mineros del congo y los ingenieros de Chinca. ¿Se traduce esto en que los trabajadores tengan condiciones occidentales? Obviamente no.
En la cuestión de la gestión de los residuos afirman esta haciendo un esfuerzo por el reciclaje de dispositivos, no solo el suyo, del que no hay aún nada que reciclar porque no están fabricados, sino de otros, incluyendo un interesante proyecto según el cual compran teléfonos de vertederos de la India y se los llevan a Bélgica, donde proceden a su reciclaje.
Y en todo esto llega ya lo que es mi visión personal. ¿Es el fairphone un teléfono justo? La respuesta es que no. Pero es un primer paso para que quizá en el futuro las cosas sean un poco más justas. Desde luego es mucho más justo no comprar ningún smartphone, y hacer la guerra a las compañías inmorales, pero dado que vas a tener un smartphone, a mí me parece una iniciativa interesante. Luego está, claro, la cuestión de las especificaciones técnicas del aparato. Bueno, no es uno de "última generación", pero el precio tampoco lo es (¿y quién necesita 2.3 GHZ en un móvil?). La exposición de los creadores de fairphone reconoce todo esto. La sinceridad parece un punto a su favor. En este sentido me gusta que en la página muestran su hoja de ruta y son bastante transparentes.
Hay un punto que me gusta adicionalmente en el fairphone, y es el respeto por el usuario final, y paso a explicarme. Normalmente cuando uno compra un aparato de estos, está pensado y creado para un sistema operativo concreto, y no se le puede poner otro. Incluso actualizarlo está ligado a los deseos del fabricante, y claro, eso es un problema porque normalmente a los fabricantes se la sudan los deseos de los clientes que tienen teléfonos anticuados. Lo extremadamente bueno de fairphone es que los drivers estarán liberados. ¿Y qué significa eso? Pues que podrás ponerle las nuevas versiones de android cagando leches, o ponerle otro sistema operativo como Firefox OS, o incluso si te gusta cacharrear ponerle Debian o cualquier otra cosa.
¿Llegará el día en el que los miembros de la hermandad tendremos un fairphone con Sistema Operativo Espada Negra (SOEN)?
Para concluir, citar que la hermandad no tiene ninguna asociación con "fairphone", ni lo avala en término alguno. Personalmente no he iniciado ninguna investigación definitiva sobre "fairphone", lo que podría revelar alguna mala práctica incompatible con el espíritu citado.
Y para concluir, el enlace de la compañía y el pryecto:
http://www.fairphone.com/
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En occidente casi todo el mundo tiene móvil. Es más, en occidente casi todo el mundo cambia de móvil cada no-demasiado-tiempo, y aún es más que más, muchísimas personas tienen un "smartphone". En cierta forma es normal, se trata de una herramienta muy versátil que nos permite acceder a grandes contenidos, y el coste no es muy elevado.
Ahí reside quizá la mayor causa de contradicción, y es que generalmente los ciudadanos de occidente tendemos a medir casi exclusivamente en función al coste económico, porque a fin de cuentas es el que nos lleva un esfuerzo. Pero en general las cosas tienen otros costes, como sea el coste ecológico y el coste moral. Son cosas que quizá parezcan un poco lejanas, pero que en mi opinión conviene tener en cuenta. En este caso centraré mi atención en tres aspectos.
El primero es que todos los dispositivos portátiles que utilizamos hoy en día necesitan tantalio, un elemento químico bastante raro. Los humanos lo conseguimos del coltán, un compuesto del que se estima que el 80% mundial está en el Congo (República Democrática del Congo), un lugar del mundo especialmente conflictivo por variados motivos históricos, uno de los cuales es... bueno, que tiene el 80% del coltán mundial. Esto es muy importante porque notables sectores de poder mundial con grandes intereses han alimentado los conflictos bélicos en la zona, y bueno, las condiciones de trabajo no son muy buenas. Trabajo infantil, horarios impensables en el mundo "civilizado", y ese tipo de cosas que no nos gustaría que nos ocurriera a nosotros. La palabra "esclavo" no está descompensada en este caso. Esta gente querría estar como están los trabajadores chinos de las plantas de montaje, lo que va a ser el siguiente punto.
El segundo punto a tener en consideración es que los móviles se fabrican en china y otros paises asiáticos donde el precio de la mano de obra especializada, y las condiciones que se les puede imponer son impensables para otros lugares del mundo. Insisto que en este caso la cuestión de las condiciones es importante, pues no solo se trata de fabricar los teléfonos a un coste aceptable, sino hacerlo también a una velocidad suficiente para que nadie se quede sin su aparato predilecto.
La tercera cuestión que me parece señalable es la que se refiere a la gestión de los recursos, y si bien la cantidad de residuos que un móvil supone es relativamente baja en comparación con otros utensilios o embalajes, hay ciertas cuestiones por las que conviene reciclar los móviles. El primer son los componentes contaminantes (que los tiene), y el segundo el citado tantalio, que se puede reutilizar. En este sentido es particularmente vergonzosa la existencia de vertederos en la india.
Existen otros muchos factores a tener en cuenta, y yo mismo conozco algunos, pero este es un artículo corto, y ya hay bastantes pocas personas que hayan llegado hasta aquí, por lo que iré yendo más al grano. Hace un tiempo vi un proyecto que llamó mi atención. Se trata de "fairfphone", el teléfono "justo", o yo diría "levemente más justo". Centraré en las cualidades que me parecen señalables en este proyecto. Citaré que se ha financiado de una forma un poco "crowfunding", aunque sin la intervención de una empresa ajena, sino desde su propia página, prevendiendo los dispositivos. Y avanzando las conclusiones, diré que es un proyecto que es más una declaración de intenciones que una justicia real.
La primera gran cualidad es que afirman que solo consiguen el coltán de zonas del congo que no están en procesos bélicos abiertos. En este sentido se puede consultar una buena cantidad de documentación y vídeos. Y bueno, esto es un tímido avance, porque por mucho que sean las zonas no militarizadas... no creo que esas minas sean un lugar en el que los trabajadores tengan seguridad social.
El segundo aspecto que es interesante es que están preocupados por las condiciones de los trabajadores implicados en la fabricación del teléfono, especialmente los mineros del congo y los ingenieros de Chinca. ¿Se traduce esto en que los trabajadores tengan condiciones occidentales? Obviamente no.
En la cuestión de la gestión de los residuos afirman esta haciendo un esfuerzo por el reciclaje de dispositivos, no solo el suyo, del que no hay aún nada que reciclar porque no están fabricados, sino de otros, incluyendo un interesante proyecto según el cual compran teléfonos de vertederos de la India y se los llevan a Bélgica, donde proceden a su reciclaje.
Y en todo esto llega ya lo que es mi visión personal. ¿Es el fairphone un teléfono justo? La respuesta es que no. Pero es un primer paso para que quizá en el futuro las cosas sean un poco más justas. Desde luego es mucho más justo no comprar ningún smartphone, y hacer la guerra a las compañías inmorales, pero dado que vas a tener un smartphone, a mí me parece una iniciativa interesante. Luego está, claro, la cuestión de las especificaciones técnicas del aparato. Bueno, no es uno de "última generación", pero el precio tampoco lo es (¿y quién necesita 2.3 GHZ en un móvil?). La exposición de los creadores de fairphone reconoce todo esto. La sinceridad parece un punto a su favor. En este sentido me gusta que en la página muestran su hoja de ruta y son bastante transparentes.
Hay un punto que me gusta adicionalmente en el fairphone, y es el respeto por el usuario final, y paso a explicarme. Normalmente cuando uno compra un aparato de estos, está pensado y creado para un sistema operativo concreto, y no se le puede poner otro. Incluso actualizarlo está ligado a los deseos del fabricante, y claro, eso es un problema porque normalmente a los fabricantes se la sudan los deseos de los clientes que tienen teléfonos anticuados. Lo extremadamente bueno de fairphone es que los drivers estarán liberados. ¿Y qué significa eso? Pues que podrás ponerle las nuevas versiones de android cagando leches, o ponerle otro sistema operativo como Firefox OS, o incluso si te gusta cacharrear ponerle Debian o cualquier otra cosa.
¿Llegará el día en el que los miembros de la hermandad tendremos un fairphone con Sistema Operativo Espada Negra (SOEN)?
Para concluir, citar que la hermandad no tiene ninguna asociación con "fairphone", ni lo avala en término alguno. Personalmente no he iniciado ninguna investigación definitiva sobre "fairphone", lo que podría revelar alguna mala práctica incompatible con el espíritu citado.
Y para concluir, el enlace de la compañía y el pryecto:
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