Hermanos Juramentados de la Espada Negra
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¿Edad dorada de los juegos de rol?
6-5-2013 16:08
Por Verion
Empiezo este artículo de esta forma, entre interrogaciones porque hay una disensión de opiniones bastante amplia por diferentes blogs de internet. Para poner en antecedentes, nada mejor que señalar a un artículo de "The freak times" que a su vez señala a otros tres que tienen una perspectiva muy negativa, incluyéndose entre ellos a "El opinómetro" y "El descanso del escriba", blogueros de muchísimo peso que crean muy buenos contenidos y de alta calidad. Por poner algún de la tendencia contraria, señalaré un artículo de "El crítico blanco", y a la muy prodigada actitud de Tiberio en "The Freak Times" que no puedo documentar debido a que los artículos en esta publicación se borran cada semana.
Soy totalmente contrario a utilizar etiquetas, y más si no son claras, como es el caso. Por ello, decir si hay "una edad de oro" o no nos puede llevar a muchos equívocos y a meter en el mismo saco una buena cantidad de conceptos, y llevarnos a un error. Creo que habría "una edad de oro" si hubiera consenso en que todos los parámetros van muy bien, y como no lo hay...
Ahora bien, en todos estos respetables medios se dicen muchas cosas de muy diferentes ámbitos, de las cuales voy a opinar yo también. Intentaré ser objetivo, aunque por supuesto se me podrá acusar de tener una postura concreta porque soy parte de la hermandad de la Espada Negra, y desde cierto punto de vista se puede pensar que tengo interés en "que exista esa edad de oro". No es el caso, como espero que quede demostrado en los siguientes puntos.
Viabilidad económica.
En algunas argumentaciones se señala que la cuestión económica es un problema importante que afecta no solo a la financiación de los proyectos, sino también a la existencia de puntos de encuentro en forma de tiendas. Este problema es muy cierto en todos los sentidos, y no creo que ninguno de los autores actuales esté viviendo de sus creaciones: un crowfunding de quince mil euros te da para sacar el libro en condiciones, hacer un par de suplementos y si eso comer unos meses. Vender un par de tiradas cortas recibiendo un 5% de las ventas tampoco te va a mantener mucho tiempo, máxime si has invertido recursos previamente en el proyecto. No creo que haya una persona que piense que este momento sea la panacea económica para este tipo de publicaciones.
En cuanto al problema mencionado de los puntos de venta, no puedo decir que tenga una experiencia muy buena en estas fechas, pero sí puedo decir que últimamente en la hermandad nos movemos mucho por jornadas de rol, y en esas sí que vemos movimiento. Quizá en eso haya un cambio de paradigma hacia los clubes, y hay unos cuantos.
Los problemas de publicar en España
En esto hace cierto hincapié Agramar en su artículo. Sé como él que hay complejos, mezquindades, odios arrastrados de hace veinte años de cuando Julito se enrolló con la novia de Enriquito, o de cuando dijo-de-nuestro-grupo-que-no-fomentaba-la-narrativa. Estamos en España, el país en el que se critica a muerte... pero ¡por los defectos del más allá! ¡No lo voy a criticar! Quizá sea verdad que hay elementos que gritan mucho, pero luego hay otros tantos que atienden simplemente, y que tienen un criterio muy diferente. No hay que dejarse avasallar por estos elementos. Si tienes ilusión por tu proyecto, sigue adelante y derruye el muro de hormigón, y si no puedes, sáltalo o rodéalo. Hay muchos caminos.
En mis tiempos se roleaba mejor
Este no es un argumento muy allá, porque prácticamente se limita a una experiencia muy limitada. Hay que moverse mucho por los clubes de rol, atender a unas cuantas partidas y dirigir otras para juzgar esa "interpretación". Yo no puedo saber si se roleaba mejor o peor, desde luego, porque cuando yo roleaba en los noventa lo hice durante años con una treintena de personas, y ahora veo a muchos más jugadores. Pero a mí este argumento me recuerda a ese típico de "es que los niños de ahora no tienen educación", o al de "es que en esta generación están todo el día emborrachándose".
Añadiré que yo jugué al rol desde principios de los noventa, y que por aquel entonces era una mierda. Te daba problemas con los profesores, te daba problemas con otros chavales, costaba de cojones encontrar un libro concreto porque la pírrica tirada que habían hecho (sí, esto no es una costumbre nueva) se había agotado, y tenías que recurrir a unas fotocopias cutres que "la madre de pedrito ha hecho en el trabajo porque tiene acceso a una fotocopiadora". Lo que sí puedo decir es que era increíble, que estábamos descubriendo algo nuevo, y nos alucinaba.
Y roleé hasta que se me gastaron las esquinas de los dados, sí, pero también jugué a las videoconsolas hasta hacerme ampollas (como los chavales de hoy en día). Entonces era la NES y ahora es la XBOX360, de acuerdo, pero el concepto no es muy diferente. A todos nos encantaba. Y paro por ahora, que me enciendo.
Mi conclusión personal
Puede que no se viva "una edad dorada". La verdad es que personalmente no me importa demasiado, porque a mí me gusta el rol, me gusta esta era, y me gusta crear y jugar a juegos de rol, y si hay diez millones de personas jugando, pues guay, y si solo somos seis (seis personas, no seis millones), pues también bien.
Ahora, desde mi punto de vista hay que tener en cuenta que hoy en día tenemos disponibles muchos recursos. Por ejemplo, tenemos todos los juegos que jugábamos entonces, más los que se han publicado desde entonces, así que cualquiera puede cogerlos y ponerse a jugar al rol. Puede que no haya una tienda, pero te puedes unir a un club de rol, que tienen unas cuotas de socio bastante asequibles y se puede recurrir a unas instalaciones muy decentes y a buen material.
¿Que te parece que el panorama de edición de ahora es una mierda? No hay problema, coge el juego que te gustaba y a jugar. El otro día precisamente en "El descanso del escriba" Agramar apuntaba a una dirección de internet de donde uno se puede bajar treinta gigas de manuales de todas las eras de dragones y mazmorras (en inglés, eso sí).
A mí los medios citados me parecen perfectamente respetables, y muchas cosas de las que dicen son ciertas. La verdad es que me da igual que se viva "una edad de oro" o "una edad de hojalata". Yo veo un montón de gente jugando a rol mucho y bien. Y también veo una gran producción en muchos ámbitos. La calidad de esa producción ya es otro asunto, y algo en lo que sin duda serán otros los que tengan que juzgar.
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Soy totalmente contrario a utilizar etiquetas, y más si no son claras, como es el caso. Por ello, decir si hay "una edad de oro" o no nos puede llevar a muchos equívocos y a meter en el mismo saco una buena cantidad de conceptos, y llevarnos a un error. Creo que habría "una edad de oro" si hubiera consenso en que todos los parámetros van muy bien, y como no lo hay...
Ahora bien, en todos estos respetables medios se dicen muchas cosas de muy diferentes ámbitos, de las cuales voy a opinar yo también. Intentaré ser objetivo, aunque por supuesto se me podrá acusar de tener una postura concreta porque soy parte de la hermandad de la Espada Negra, y desde cierto punto de vista se puede pensar que tengo interés en "que exista esa edad de oro". No es el caso, como espero que quede demostrado en los siguientes puntos.
Viabilidad económica.
En algunas argumentaciones se señala que la cuestión económica es un problema importante que afecta no solo a la financiación de los proyectos, sino también a la existencia de puntos de encuentro en forma de tiendas. Este problema es muy cierto en todos los sentidos, y no creo que ninguno de los autores actuales esté viviendo de sus creaciones: un crowfunding de quince mil euros te da para sacar el libro en condiciones, hacer un par de suplementos y si eso comer unos meses. Vender un par de tiradas cortas recibiendo un 5% de las ventas tampoco te va a mantener mucho tiempo, máxime si has invertido recursos previamente en el proyecto. No creo que haya una persona que piense que este momento sea la panacea económica para este tipo de publicaciones.
En cuanto al problema mencionado de los puntos de venta, no puedo decir que tenga una experiencia muy buena en estas fechas, pero sí puedo decir que últimamente en la hermandad nos movemos mucho por jornadas de rol, y en esas sí que vemos movimiento. Quizá en eso haya un cambio de paradigma hacia los clubes, y hay unos cuantos.
Los problemas de publicar en España
En esto hace cierto hincapié Agramar en su artículo. Sé como él que hay complejos, mezquindades, odios arrastrados de hace veinte años de cuando Julito se enrolló con la novia de Enriquito, o de cuando dijo-de-nuestro-grupo-que-no-fomentaba-la-narrativa. Estamos en España, el país en el que se critica a muerte... pero ¡por los defectos del más allá! ¡No lo voy a criticar! Quizá sea verdad que hay elementos que gritan mucho, pero luego hay otros tantos que atienden simplemente, y que tienen un criterio muy diferente. No hay que dejarse avasallar por estos elementos. Si tienes ilusión por tu proyecto, sigue adelante y derruye el muro de hormigón, y si no puedes, sáltalo o rodéalo. Hay muchos caminos.
En mis tiempos se roleaba mejor
Este no es un argumento muy allá, porque prácticamente se limita a una experiencia muy limitada. Hay que moverse mucho por los clubes de rol, atender a unas cuantas partidas y dirigir otras para juzgar esa "interpretación". Yo no puedo saber si se roleaba mejor o peor, desde luego, porque cuando yo roleaba en los noventa lo hice durante años con una treintena de personas, y ahora veo a muchos más jugadores. Pero a mí este argumento me recuerda a ese típico de "es que los niños de ahora no tienen educación", o al de "es que en esta generación están todo el día emborrachándose".
Añadiré que yo jugué al rol desde principios de los noventa, y que por aquel entonces era una mierda. Te daba problemas con los profesores, te daba problemas con otros chavales, costaba de cojones encontrar un libro concreto porque la pírrica tirada que habían hecho (sí, esto no es una costumbre nueva) se había agotado, y tenías que recurrir a unas fotocopias cutres que "la madre de pedrito ha hecho en el trabajo porque tiene acceso a una fotocopiadora". Lo que sí puedo decir es que era increíble, que estábamos descubriendo algo nuevo, y nos alucinaba.
Y roleé hasta que se me gastaron las esquinas de los dados, sí, pero también jugué a las videoconsolas hasta hacerme ampollas (como los chavales de hoy en día). Entonces era la NES y ahora es la XBOX360, de acuerdo, pero el concepto no es muy diferente. A todos nos encantaba. Y paro por ahora, que me enciendo.
Mi conclusión personal
Puede que no se viva "una edad dorada". La verdad es que personalmente no me importa demasiado, porque a mí me gusta el rol, me gusta esta era, y me gusta crear y jugar a juegos de rol, y si hay diez millones de personas jugando, pues guay, y si solo somos seis (seis personas, no seis millones), pues también bien.
Ahora, desde mi punto de vista hay que tener en cuenta que hoy en día tenemos disponibles muchos recursos. Por ejemplo, tenemos todos los juegos que jugábamos entonces, más los que se han publicado desde entonces, así que cualquiera puede cogerlos y ponerse a jugar al rol. Puede que no haya una tienda, pero te puedes unir a un club de rol, que tienen unas cuotas de socio bastante asequibles y se puede recurrir a unas instalaciones muy decentes y a buen material.
¿Que te parece que el panorama de edición de ahora es una mierda? No hay problema, coge el juego que te gustaba y a jugar. El otro día precisamente en "El descanso del escriba" Agramar apuntaba a una dirección de internet de donde uno se puede bajar treinta gigas de manuales de todas las eras de dragones y mazmorras (en inglés, eso sí).
A mí los medios citados me parecen perfectamente respetables, y muchas cosas de las que dicen son ciertas. La verdad es que me da igual que se viva "una edad de oro" o "una edad de hojalata". Yo veo un montón de gente jugando a rol mucho y bien. Y también veo una gran producción en muchos ámbitos. La calidad de esa producción ya es otro asunto, y algo en lo que sin duda serán otros los que tengan que juzgar.
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