¿Por qué un juego de rol de Espada Negra?
21-1-2013 13:28
En mi serie de escritos en relación con el juego de rol de Espada Negra me encuentro con múltiples elecciones. Hay tanto que decir, y resulta tan enriquecedor escribirlo que las ideas se me agolpan, y tengo que hacer esfuerzos por contenerlas.
Por fortuna hay un criterio claro para ordenarlas, y en este caso va a ser el mismo que el que sigue el reglamento que próximamente tendremos publicado en edición web. En este caso llego a una primera aproximación que todavía no toca regla alguna, pero que da lugar a una exposición prolongada.
¿Por qué un juego de rol de Espada Negra?
Creo que es la primera cuestión a responder, pero no de forma única, sino atendiendo a diferentes formas de verla, o incluso deformándola convenientemente para expresar los múltiples ámbitos de un posible preámbulo personal.
¿Por qué jugamos a juegos de rol? Esta podría ser la pregunta más general. Jugamos a juegos de rol porque nos gusta el concepto del juego de rol. Es algo que parece simple, pero que no es fácil de explicar a alguien que no lo vive. Está claro que jugar al rol nos divierte, pero más lejos que eso, y sin querer entrar en manidos estereotipos, jugar al rol es una forma de vida. Es fantasear con una existencia diferente, especular con lo que podría ser si las cosas fueran de otra forma. Es sumergirse en una historia con más inmersión que la surgida de ver una película o leer un libro. Y esto se debe, principalmente, a la interacción, a que el jugador decide lo que hace, corre riesgos, y por ello sufre, se emociona, se frustra, y sobre todo se excita cuando consigue sus propósitos.
En general los jugadores de rol no necesitan demasiados recursos materiales para exponer su creación, en este caso una partida o campaña. Sirve un reglamento, algunos dados, lápices, papel, y poco más. Lo que sí se utiliza es interpretación, desinhibición e improvisación. Y eso, aunque cuesta cultivarlo, es gratis. Y precisamente jugando se cultiva. Y cuanto más se juega, por lo general, más te gusta.
Pero jugar a juegos de rol incluye otra cualidad implícita importante: jugando al rol te relacionas. Ya sea los pocos domingos libres que te deje tu trabajo, o participando en foros, o al salir de clase (o quizá mientras se debería estar en clase) al jugar a juego de rol estás compartiendo tus intereses y gustos con otras personas, pero aún más, estás compartiendo tus creaciones y tu interpretación. Eso nos gusta, nos enriquece e incluso nos vincula.
Jugar al rol se lleva dentro. No me gustaría alimentar los prejuicios de un lector que malinterpretara mis escritos y llegara a la conclusión de que los roleros siguen un estereotipo. Hay jugadores de rol de muchos tipos diferentes, y ni siquiera es que seamos de un mismo “clan”. Pero lo que sí creo que es cierto es que se lleva un poco dentro. Al leer una novela piensas en cómo tu personaje podría relacionarse con los suyos. Cuando ves un enfrentamiento en el trabajo piensas en generales liderando sus ejércitos. Al menos a mí me pasa.
Yo, en definitiva, creo que el mundo sería un lugar mejor si todas las personas jugaran a juegos de rol. Creo que la gente en definitiva sería más feliz, y que andaría preocupándose menos por problemas que no tienen importancia. Creo que muchas ambiciones estúpidas deberían relegarse a personajes de partidas de rol. Creo que nos iría mejor si todos entendiésemos que hay cosas demasiado destructivas para ser reales, y momentos en los que todo nuestro afán competitivo debería desfogarse en eliminar al villano de turno. Lo que por mi parte da final a mi primera pregunta.
¿Por qué hacer un juego de rol de Espada Negra? Esta es una pregunta con mucha chicha en la que responder entra en el terreno muy personal, y que no tiene una sola respuesta. Hacemos un juego de rol de Espada Negra porque hemos desarrollado el mundo de la Espada Negra, y nos gusta, y ningún juego de rol funciona del todo bien con su ambiente. Lo hacemos porque nos gusta la táctica (realmente nos gusta) y no encontramos un sistema realmente táctico a nuestro criterio. Lo hacemos porque nos gusta la narrativa (¡realmente nos gusta!) y ningún juego de rol cumple con nuestras expectativas narrativas. Lo hacemos principalmente porque nos gusta jugar, pero también porque nos gusta compartir.
Nos gusta el juego de rol de Espada Negra. Queremos que juguéis.
Desde luego no lo hacemos porque pensemos en ganar dinero con él. Claro que intentamos ganarnos la vida haciendo juegos (sobre todo video juegos), pero no creemos que un juego de rol deba suponer una ganancia considerable para nuestras personas. Esto se debe a una buena cantidad de motivos. El primero de ellos, que hemos invertido una cantidad de tiempo tan ingente que dudo que la economía pudiera compensarnos. El juego de rol de Espada Negra ha pasado por cuatro sistemas claramente diferenciados y muchos subsistemas entre ellos. Hemos tenido muchísimas jornadas de prueba, incontables discusiones trasnochadas, enfados, deserciones, amenazas, y en general todo tipo de dificultades que cabe esperar de un proyecto de cierto tamaño. Hemos tenido dificultades para financiarnos, pero hemos prosperado, y el juego ha crecido hasta su estado actual.
Tampoco queremos pensar en el juego de rol como en una explotación comercial, porque eso empañaría al mismo. La compañías que sí pretenden obtener un beneficio claro necesitan publicar más y más libros, y para ello tienen que establecer un reglamento que los tolera o permite, basado normalmente en ampliar tipos de personaje o añadir incontables opciones aparentemente diferentes hasta que simplemente se saca una nueva versión.
Para nosotros un juego de rol es más parecido a un buen servicio público: no se trata de que sea rentable, se trata de que de un buen servicio. Por eso no pensamos en la explotación económica, porque así el juego será libre de las influencias del mercado, y solamente primará ofrecer una buena experiencia.
Tampoco hacemos el juego de rol por la aprobación, porque nos digan que es un gran juego. El juego de rol de Espada Negra es desagradable. Te mete una espada por la rendija de la armadura (lo hace de verdad) en cuanto tomas una sola mala decisión, y te deja listo para los cuervos. Te hace sufrir para oler siquiera cualquier capacidad sobrenatural, y una vez obtenida te hace cuestionarte realmente su uso. Te hace ahorrar para tener una espada digna de ese nombre. Te obliga a tomar partido en los conflictos. No te deja mirar hacia otro lado, y si miras para otro lado lo haces bien consciente de lo que estás dejando atrás.
Esto da respuesta a mi segunda pregunta.
¿Por qué jugar al juego de rol de Espada Negra? Desde luego la respuesta a esta pregunta responde a cada uno, y sin duda entra en una valoración de las cualidades del juego que por mi parte dará lugar a muchos artículos que sin duda escribiré. Puedo hacer una leve enumeración de motivos por los que yo juego, y por los que creo que otras personas juegan. Me quedaré solo con tres, lo más generales que pueda.
-Porque tiene un ambiente propio. Tenso, duro y cruel como solo la peor humanidad puede serlo. Porque las naciones y sus relaciones implican a los jugadores y los empuja a participar.
-Porque el sistema es resolutivo, es táctico y es realista. Porque es objetivo, y en general deja poco lugar a las ambigüedades. Te odia, luchas contra él, no te deja relajarte. Pero también es justo, y te recompensa (un poco) cuando persigues tus objetivos con persistencia y criterio.
-Porque cuando te haces un personaje sientes que es tuyo, que te representa, que has podido elegir entre un número entendible de opciones que da a un número inconmesurable de personajes. Sientes que cuando muera se habrá perdido algo importante. Sientes que su éxito será tu éxito.
Y por ahora doy por respondida la pregunta, con ganas de seguir escribiendo sobre los diversos aspectos del juego de rol de Espada Negra.