Una de las peculiaridades de los juegos de rol es que en cada uno de ellos el manual se refiere al “Dungeon Master”, “director”, “narrador”, o lo que sea de una forma variable. Esto a nosotros nos supuso una diseración en la que acabamos eligiendo el término “Creador”. A lo largo del artículo voy a defender esta elección, pero también quiero dejar claro que no es algo que hayamos puesto ayer, sino hace años, y que se puede comprobar en el archivo de internet, y con menor lapso de tiempo en el manual impreso. Cito literalmente:
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