Hermanos Juramentados de la Espada Negra
Ocho números de ocin... y retos venideros
21-5-2015 16:24
Por Verion
Ya han pasado casi dos meses desde que el hermano Vorvek y yo sacáramos a la luz la publicación de ocio independiente “ocin.es”, un proyecto que intentaba cubrir un espacio en ese momento vacío, el de la publicación semanal de noticias por escrito, y que por el momento ha conseguido el hito más importante: ofrecer un número interesante cada lunes.

Ocin se mantiene en pie sobre cuatro patas de una importancia sustancial que paso a citar.
  • Los que envían noticias. Sin ellos no habría nada que votar. Han ido en aumento desde que ocin abrió, y cada vez se sueltan más a la hora de enviar contenidos. También percibo cierta presencia de envíos anónimos ocasionales de proyectos concretos.
  • Los que votan noticias. Dictaminan qué noticias aparecen en portada y en qué orden lo hacen, y como tal forman el criterio de edición. Sin ellos no habría criterio.
  • Los que leen noticias. Es decir, los que van el lunes a ver qué ha pasado. Sin ellos no habría mucho sentido en sí, salvo el de hemeroteca.
  • Los que programamos. El hermano Vorvek y yo. Es necesario que alguien lo haga, aunque no es muy importante quién lo haga, en tanto que lo haga bien.
Nótese que dejo fuera de las patas a los creadores de contenidos externos y a los administradores. A los primeros los dejo fuera porque son una condición previa a la existencia de ocin. Si no hubiera habido noticias y blogs de los que hablar, no habría existido ocin, y si algún día desaparecen, ocin desaparecerá también. Más que una pata de la mesa son el suelo de la habitación.

El otro asunto al que no he hecho referencia es a los administradores. Actualmente ocin solo tiene un administrador, que soy yo, y tiene tendencia a que desaparezca. Para entendernos, esto tiende a que dentro de unos meses yo pueda llegar un lunes y ver las noticias sin haber enviado ninguna, votado ninguna, ni realizado cambios administrativos de tipo alguno.

Voy a enumerar las tareas específicas que he realizado dentro de ocin, y la perspectiva temporal de las mismas.
  • Votar: en los primeros dos números de ocin voté, y mi voto tuvo su importancia. Después dejé de hacerlo aunque la naturaleza logarítmica del voto garantizaba que mi capacidad se fuese muy arriba.
  • Enviar noticias: al principio los usuarios estaban algo cortados y les costaba enviar contenidos, mientras que en la actualidad se sueltan más. Ahora mismo si no envío un contenido importante, alguien lo envía horas después.
  • Moderar noticias: en los primeros números corregía algunos textos y sobre todo etiquetas. Las etiquetas son parte del sistema, y son necesarias, pero hay usuarios que las ven como algo opcional. En este sentido tenemos que trabajar un poco la interfaz para que sea más práctica.
  • Publicar el número: durante las madrugadas del lunes uso la interfaz de creación de números. ¡Pero eso también se va a acabar! Es posible que este lunes el número nueve de ocin se publique de forma automática sin interacción administrativa.
De las cuatro posibles acciones como administrador, dos están siendo ya totalmente aceptadas por los usuarios (votar y enviar noticias) y una va a ser automatizada (crear el número). La administración de los contenidos es algo más delicada, pero veo un futuro no muy lejano en el que el sistema pueda prescindir de mí.

Hasta el momento se han producido una serie de rupturas de la estructura que han exigido mi participación como administrador. Hay que decir que quizá mucha parte de esta responsabilidad puede caer en el futuro en la propia votación. Es decir, parte de una noticia es si está bien elaborada.
  • Mal etiquetado o nulo etiquetado. Las etiquetas son parte del sistema, pero el sistema de introducción de etiquetas es demasiado básico. Trabajar en la interfaz podría dar lugar a solventar esto.
  • Textos copiados y pegados de páginas con licencias no compatibles. En principio esto no es una práctica aceptable, y en este sentido lo que debería dar lugar es a un texto corto que enlaza a la página original. Al principio me esforzaba mucho en encontrar al creador de la noticia y sugerirle los cambios, pero en la actualidad ya no lo estoy haciendo: si los votantes lo aceptan, es, a fin de cuentas, su responsabilidad.
  • Noticias repetidas. A veces un usuario despistado envía una noticia que ya está en cola. A veces un usuario no despistado envía una noticia que ya está, pero que está mal. Esto genera una situación extraña porque los votantes se dividen, y pueden salir las dos, o no salir ninguna...
  • Noticias repetidas en semanas diferentes. Sí, se ha dado ya el caso.
La mejora del software tiene un peso importante para mejorar todas estas circunstancias, pero creo que aún así cierta moderación sea necesaria. Creo que incluso esta moderación tiene que ser, con el tiempo, parte del sistema de votación. No tengo aún una clave, pero quizá los usuarios de mayor puntuación puedan plantear cambios que a su vez sean votados de una forma ágil y cómoda, no sé si por todo el mundo o por esos usuarios. Quizá el concepto de noticia repetida pueda ser también incluido con cierta algoritmia para que se sumen los votos no comunes pero solo se publique una. Quizá ciertos usuarios tengan cierto derecho a veto o a incluir observaciones en una noticia... hay muchas posibilidades, y pueden ser mejores que la administración centralizada.

Quizá sea razonable incluir en la sección de enviado de noticias una advertencia con las buenas prácticas de envío de noticias, y quizá lo mismo en la sección de voto, pero en principio no me agradan estos añadidos porque invitan a la no participación. Claro que quizá compensen, es algo que quizá se planteé a los usuarios de ocin en algún momento cercano.

Otros problemas podrían surgir en el futuro. Estamos hablando de mafias de voto (ya tratadas, pero que todavía no han ocurrido), colectivos que envían muchas noticias, bots de spam y cosas así. Creo que todo esto se puede solventar, de nuevo, entre un software bien diseñado y una comunidad votante.

Ocin es un portal de la comunidad. Su uso se debe a la comunidad, y la responsabilidad de su éxito o su fracaso pertenece a la comunidad. Al hermano Vorvek y a mí nos corresponde dotar a los usuarios de herramientas que faciliten y garanticen la transparencia, y eso es lo que intentaremos hacer en el tiempo venidero.


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